Hace unos días llegaba hasta nuestras manos un vídeo muy interesante que trataba sobre salud, bienestar y juego en el trabajo. Se trata de un clip extraído del podcast Feel Better Live More del Dr Rangan Chatterjee en el que entrevista al Dr Gabor Maté, médico y escritor canadiense, reconocido por su estudio del estrés, los trastornos por déficit de atención o el trauma, entre otros.
En este fragmento, Maté recuerda lo que Winnie The Pooh nos enseñó sobre la importancia del juego en la infancia y en la vida de las personas, para poder disfrutar de buena salud y bienestar. El doctor reflexiona sobre la inconsciencia de las personas para reconocer nuestro propósito en el mundo, y cómo los momentos que compartimos con otras personas jugando, tanto cuando un día fuimos niños como en la vida adulta, nos reconectan y nos ayudan a encontrar el sentido de la vida. Y es que el libro de Alan Alexander Milne termina con una cita muy inspiradora:
«And whatever they do, or wherever they go in the Enchanted Forest, a little boy and his bear will always be playing».
Dicha cita quizás os suena porque es la que inspira la posterior película, Christopher Robin, que Disney lanzó en 2018. A continuación podéis recuperar el vídeo con la intervención del Dr Gabor Maté:
Cifras relevantes sobre salud y bienestar
Es una realidad que el estrés ha aumentado desde el inicio del COVID-19, aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya hacía algunos años que lo había catalogado como “la epidemia del siglo XXI”. Lo preocupante no es que se trate de casos aislados, sino que se ha convertido en una constante en las organizaciones, pues el año pasado 3 de cada 4 trabajadores declaraba haberse visto afectado por el síndrome burnout. Y esto no es exclusivo en trabajadores y trabajadoras; cada vez son más los niños y niñas de entre 8 y 12 años que sufren estrés –normalmente por su relación con la educación y el aprendizaje o la falta de tiempo libre.
Volviendo a los puestos de trabajo, estudios realizados por el McKinsey Health Institute demuestran que asegurar la salud y el bienestar de las personas en las empresas hace que mejore la productividad y la atracción y promoción del talento –otros de los grandes retos de las empresas en la actualidad. Para ello, el informe del MHI destaca, entre otros factores, que es clave poner el foco en fomentar la interacción social, generar sentido de pertenencia a la empresa transmitiendo mensajes y valores afines, y gestionar el estrés –muchas veces inevitable en según qué responsabilidades. Y claramente podemos ver como el juego ayuda con todos estos aspectos.
¿Sabías que…? Desde Marinva hemos diseñado para el Ayuntamiento de Barcelona el juego de mesa Antídots, una propuesta lúdica co-creada con la infancia para concienciar sobre la soledad no deseada y el aislamiento social entre adolescentes, adultos y personas mayores, entre otros.
El poder del juego es tal, que incluso ha inspirado para el tratamiento de experiencias traumáticas. Emily Holmes, doctora en psicología por la Universidad de Cambridge e investigadora en Instituto Karolinska, ha liderado un estudio en el que ha demostrado que el famoso Tetris es una herramienta útil para reducir la frecuencia y la intensidad de flashbacks traumáticos. Es decir, jugar a este videojuego durante un periodo de tiempo, en las horas posteriores a un evento que genere altos niveles de estrés en una persona, puede disminuir significativamente el número de recuerdos intrusivos experimentados en la semana siguiente y reducir síntomas como el insomnio, la ansiedad y la depresión. ¡Es una “vacuna cognitiva”!
Lo interesante de este experimento es que lo que se ha encontrado es la relación entre la memoria y la construcción de recuerdos y la alta concentración visoespacial que requiere el jugar a un videojuego como el Tetris –o muchos otros, como Portal (Valve Corporation), Superliminal (Pillow Castle Games), Geometry Dash (RobTop Games) o The Witness (Thekla, Inc). Si bien la asistencia de un profesional de la salud sigue siendo necesaria para el tratamiento de este tipo de enfermedades, el estudio demuestra una vez más el gran poder del juego en la salud y el bienestar de las personas.
Un equipo lúdico es un equipo preparado para los retos
Cada vez son más las empresas y líderes que entienden que las personas que juegan y encuentran placer en lo que hacen, tienden a disfrutar de buena salud y bienestar. Esto las convierte en personas que tienen el control de su vida, lo que las hace más ágiles ante los cambios y la toma de decisiones en momentos de incertidumbre. Las personas con actitud lúdica son aquellas que detectan oportunidades para jugar, innovar, experimentar y mejorar el mundo que les rodea. Y lo mismo hacen en los equipos en los que trabajan, ayudando a introducir la ludicidad en los entornos laborales. Para reforzar este impulso, también es necesario que las organizaciones abracen el juego dentro de la cultura interna. Lo que no significa colocar un futbolín en la oficina, porque el juego está en las personas, en la actitud y en los comportamientos, no en los objetos.
Si quieres saber un poco más sobre la actitud lúdica, visita esta breve intervención de Imma Marín, fundadora y presidenta de Marinva, en nuestro canal de YouTube.
Como es natural, en Marinva esto es una realidad. En línea con esta filosofía y cultura interna, el equipo hemos compartido dos días en plena naturaleza para enmarcar y enfocar los retos de los próximos años. En un entorno envidiable en medio del Parque Natural del Montseny, y acompañados de momentos de juego y mucha actitud lúdica hemos trabajado el propósito, el relato y los valores. Esto nos ha dado contexto para dibujar el plan de ruta, con acciones de crecimiento vinculados al talento, los procesos y la innovación, para poder seguir aportando valor, ludicidad y alegría en proyectos transformadores –como muchos de los que hemos acumulado desde 1995, ¡o mejores!
Y es que desde Marinva, nos mueve el acompañar a personas, equipos y organizaciones a reconectar con el poder del juego. Más allá de porque sea útil, porque así debe ser. Para que el juego deje de ser nostalgia y pasado, y se convierta en presente y futuro. Porque así, recordaremos a Winnie The Pooh y siempre tendremos la puerta abierta al Bosque de los Cien Acres.
